Vaya como declaración de intenciones que nunca he tenido prejuicios en torno a un colectivo tan necesario como el de los farmacéuticos y espero que este sentimiento sea mutuo.
Hace una semana acudí al Congreso Infarma, que este año en Barcelona, ha concitado a todo el mundo farmacéutico de nuestro país. Mi presencia en dicho congreso tenía como objetivo, la presentación de un estudio de investigación en adherencia terapéutica en los pacientes con hipercolesterolemia y que involucra de manera clara y diáfana a médicos y farmacéuticos.
Siempre he entendido que los farmacéuticos y también los de oficinas de farmacia, son ante todo y sobre todo, profesionales sanitarios. No concibo que su vertiente empresarial acapare y engulla su vertiente sanitaria.
En estos meses pasados, hemos asistido a un intenso debate, donde se habla de liberalizar la farmacia y, aunque sobre ello ya me he pronunciado en otras ocasiones, debo decir que soy defensor convencido y reivindico la atención farmacéutica bien realizada por profesionales sanitarios farmacéuticos y que de una vez por todas, nos pongamos de acuerdo médicos y boticarios.
Los mensajes que debe de recibir el paciente deben ser los mimos desde todos los protagonistas del sistema sanitario, por lo que ambos profesionales debemos ponernos de acuerdo en qué es lo que transmitimos al paciente y qué aspectos reforzamos unos de los otros. Nadie va a invadir parcelas de competencias, nadie tiene poco definido su rol, creo que ambos colectivos somos excepcionalmente únicos para el paciente.
Boticarios y médicos somos los más cualificados para enseñar al paciente a ser responsables con su salud. ¿Donde residen los miedos?, ¿donde las suspicacias?. Considero que ambos Consejos Profesionales deben de tener la generosidad de sentarse y hablar, comprenderse, entenderse e identificarse como iguales. Si es necesario, se deberán definir bien los roles, las actuaciones y, sobre todo, se debe de dar prioridad al paciente por encima de todas las cosas.
Espero y deseo que este estudio sea una pequeña gota que ayude a que el mar sea mas océano.