¿Medimos correctamente los profesionales sanitarios la PA?, y si lo hacemos bien ¿tiene algún significado que existan diferencias en la PA entre los dos brazos?. Evaluemos bien la PA y, sobre todo prestemos atención a hallazgos que normalmente nos pasan desapercibidos, pues tienen significados clínicos de gran importancia.
Asociación de la diferencia de presión arterial sistólica entre ambos brazos con la enfermedad vascular y la mortalidad. Referencia bibliografica: ClarkCE, Taylor RS, Shore AC, Ukoummunne OC, Campbell JL. Association of a difference in systolic blood pressure between arms with vascular disease and mortality: a systematic review and meta-analysis. Lancet January 30, 2012 Epub ahead of print
Leyendo este interesante metanálisis de 20 estudios, acerca de la diferencia de Presión Arterial Sistólica (PAS) entre uno y otro brazo, me ha venido a la memoria, la insistencia que hacemos en la facultad de medicina y en las escuelas de enfermería sobre la técnica de medición dela PA. ¡Cuanta insistencia y qué poco caso se nos hace a los docentes en este aspecto!. La eclosión actual de aparatos de automedición de la PA (AMPA), con el claro propósito de que los pacientes sean autónomos y responsables con su propio proceso, no nos puede invitar a olvidar que los profesores debemos insistir con nuestros alumnos acerca de la técnica, pero que también los profesionales sanitarios deben insistir sobre la técnica de medición dela PA sobre sus pacientes hipertensos.
Que, ¿por qué digo esto?. Porque aún se sigue midiendo mal la PA, por parte de los profesionales y por parte de los pacientes. Todavía vemos en nuestras consultas de Atención Primaria, tanto por parte de medicina como de enfermería, la toma apresurada de la PA, la medición en un solo brazo, en el paciente que nos llega corriendo, recién comido…, y un largo etc de despropósitos, que hacen que una técnica sencilla y precisa, se convierta en un mero hecho formal, carente de validez científica. Y, no hablemos de cuando el paciente acude a la farmacia para tomarse la PA, ya no en condiciones similares, sino peores.
Este metanálisis nos pone de manifiesto que diferencias de PAS por encima de 10 a 15 mmhg tienen evidencia científica de enfermedad vascular periférica; y que, por encima de 15 a 20 mmhg tiene significado como indicador de predicción de enfermedad cardiovascular y cerebrovascular.
Qué técnica tan sencilla y cuánto nos dice, habrá que esmerarse en su metodología de medida, pues la rentabilidad que obtenemos de su lectura precisa es muy alta.
Enlace al artículo: www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/22293369